5 de noviembre, se acabó...

Esa noche sólo dormí 2 horas. Cuando Philippe se fue a dormir (que a él le quedaban 3 días de viaje aún), me fui a mi habitación a empezar a preparar el equipaje. Fue difícil porque quería meter muchas cosas en el equipaje de mano. Me tuve que romper bastante la cabeza.

Tardé cerca de 3 horas, también porque me lo tomé con calma, ya que no tenía ganas de dormir. De mientras veía la tele. Cuando ya por fin terminé bajé a la sala de estar y había gente despierta (a las 4,30 de la madrugada) así que charlé un rato y ya a las 5 y pico me dormí.

Al día siguiente Philippe me acompañó a la estación de Minamisenju donde montamos un numerito propio de una telenovela, los dos llorando cuando me subí a la Joban con el equipaje.
En narita había cola para facturar pero no una cola inmensa. Los controles los pasé rápido y me reuní con Mire y su pareja! Estuvimos charlando hasta que embarcamos. Jajajaja pobre de mí, y yo que me quejaba del primer avión porque no tenía películas en español, pues éste no tenía ni pantallas, y además los asientos eran estrechos, viejos, desgastados, y el avión era lento. Tardó 10 horas y media en llegar a Moscú. Me quedé flipando.

La verdad es que lo pasé fatal en ese vuelo porque me sobrevino un resfriado repentino y muy fuerte, y encerrada dentro de esa lata más de 10 horas... El trasbordo en Moscú lo pasé sin problemas, aunque con la desbordante amabilidad del personal de tierra (nótese la ironía).

El segundo vuelo fue mejor. Los asientos eran algo más amplios (me refiero al espacio entre una fila y otra), y tenía el asiento de mi lado libre. Fueron unas 6 horas, la verdad es que no sé exactamente porque me quedé dormida un rato. Y ya llegué a Málaga, el día 5 a las 23,00 horas.

Y así finalizó mi viaje de 21 días por Japón!

En otra entrada pondré fotos de las compras XD